En un momento en que muchos podrían haber dicho que eramos demasiados jovenes, demasiado riesgoso o demasiado imposible, tomamos la decisión de seguir nuestro sueño y abrir las puertas de nuestra waflería en la ciudad de Arequipa.
Tres años después, podemos decir con orgullo que hemos logrado crear un espacio donde la pasión, la creatividad y la dedicación se unen para ofrecer una experiencia única y deliciosa a nuestros clientes.
Pero nuestra waflería es más que solo un lugar para comer. Es un símbolo de que los sueños pueden hacerse realidad, de que la perseverancia y el trabajo duro pueden llevarnos a lugares increíbles.
Detrás de nuestra waflería hay dos jóvenes emprendedores que han trabajado arduamente para hacer realidad su sueño. Y con cada waffle que servimos, sentimos que estamos compartiendo un poco de nuestra pasión, nuestra creatividad y nuestra dedicación con la comunidad.
Así que a todos aquellos que han soñado con hacer realidad su pasión, les decimos: ¡no tengan miedo de tomar el primer paso! ¡No tengan miedo de seguir su sueño!, ¡ustedes también pueden!.
Karla S. y Renato C.